La provincia más austral del país se encuentra en estado de máxima preocupación tras el avance del Gobierno nacional sobre el histórico régimen de promoción industrial fueguino. En diálogo con Gustavo Sylvestre en Radio 10, el secretario general de la UOM Río Grande, Oscar Martínez, confirmó que el próximo martes se llevará adelante un paro por tiempo indeterminado con el acompañamiento de múltiples gremios y sectores productivos de la provincia ante las medidas tomadas por el gobierno libertaria de facilitar la importación de productos como celulares o aire acondicionados.
“Ya lo veníamos advirtiendo. Esto no nos sorprende, pero nos indigna”, afirmó Martínez, en alusión a los recientes anuncios del Gobierno que plantean una revisión del régimen de beneficios fiscales que sostiene a la industria electrónica en la isla desde la década del 70. La medida pondría en jaque miles de puestos de trabajo, además de impactar gravemente en la economía local.
“La industria electrónica es el motor económico de Tierra del Fuego. Hoy hay más de 7.500 metalúrgicos, y si sumamos a los trabajadores indirectos de servicios, logística y comercios, estamos hablando de buena parte de la población económicamente activa”, detalló el dirigente sindical.
Martínez subrayó que la industria fueguina no solo genera empleo directo, sino que sostiene el entramado social a través del consumo, la recaudación de impuestos y el financiamiento de servicios públicos esenciales. “Sin esta industria, no hay ingresos municipales ni provinciales suficientes para sostener educación, salud y servicios. Lo que está en riesgo es el presente y el futuro de toda la provincia”, aseguró.
Consultado por el rol del Ejecutivo, el dirigente metalúrgico criticó duramente la postura del Gobierno: “Hay funcionarios que hablan con ignorancia y con provocación, como si Tierra del Fuego fuera un gasto o una carga, cuando en realidad es una conquista estratégica del país. No entienden ni la historia, ni la geopolítica, ni la realidad social de la isla”.
La medida de fuerza anunciada para el martes próximo será masiva. “Toda la provincia se está movilizando. Esta vez, no solo los trabajadores, sino toda la comunidad. Porque lo que está en juego no es solo una ley, sino nuestra forma de vida”, sentenció Martínez.
Desde el gremio metalúrgico aseguran que seguirán reclamando diálogo y respaldo político, pero que no descartan profundizar las medidas si el Gobierno insiste con su embestida.