El profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad de Sao Paulo, Gustavo Segré, dialogó con Radio La Red sobre la sorpresiva detección de cáncer de laringe de Lula da Silva. Al respecto dijo que se lo diagnosticaron el sábado cuando fue a hacerse un chequeo de rutina, al que habitualmente se someten presidentes y ex presidentes, y agregó que la noticia «nos impactó a todos». Sin embargo destacó que «Lula siempre se mostró una persona muy esperanzada, y esto lo considera un mal trago por el que tendrá que pasar y del que va a salir». Además, su poder en las sombras del gobierno brasilero, su relación con Dilma Rousseff y el PT, y la esperanza de un pueblo que espera que su líder se recupere.
La enfermedad
Segré contó que «Lula siempre fue muy prudente con estas cosas», y que se enteró «el sábado por la mañana cuando se realizó un chequeo de rutina al que se someten presidentes y ex presidentes. Es el mismo hospital donde está siendo tratado el presidente de Paraguay, (Fernando) Lugo, y donde fue tratada Dilma Rousseff de un cáncer linfático, que por suerte hoy todos los exámenes le dan que está erradicado«. El profesor argentino que reside en Brasil contó, además, que en ese país «todas las cuestiones de salud son inmediatas: detectan el cáncer y días después ya comienzan con las sesiones de quimioterapia para atacar y erradicar de raiz el problema. Así que nos sorprendió mal pero todos los brasileros están confiados».
Lula en la política de Brasil
Por otra parte, el politólogo destacó que Lula «sigue teniendo influencia en el PT, y es alguien que participaba desde las sombras; sobre todo porque gran parte de los ministros que Dilma Rousseff heredó de la gestión de Lula, que no eran del PT sino aliados, fueron echados por corrupción, y era él el que hacía las gestiones de contacto con los partidos aliados. Era Lula quien le indicaba a Dilma Rousseff si debía dejarlo o no a cada uno de estos ministros, y cuánto tiempo. La interacción de Lula con Dilma es sin lugar a dudas muy activa. Sin embargo, por las características de personalidad de Dilma, la última palabra era de ella». De todas formas, y a la luz de su enfermedad, Segré señaló que «es difícil imaginar un Lula corriéndose de la gestión política y de la primera planta del PT, pero esto probablemente lo hará quedarse un poco más quieto». »
La relación con el pueblo
Por último, destacó la gran relación que mantiene el ex presidente de Brasil con su pueblo. «Lula tenía un contacto increíble con el pueblo: prescindía de seguridad, como lo sigue haciendo hasta hoy; absolutamente simpático, muy simple y campechano», y en consecuencia señaló que «es muy recordado por la gente. Te diría que si hay un evento público y en un lado de la calle está Lula y del otro Dilma Rousseff, va a haber más gente mirándolo a Lula que a Dilma«. En ese sentido insistió al señalar que «nos sorprendió la noticia pero todos los brasileros están confiados de que es un mal trago del que va a salir adelante».
Audio completo de la entrevista
Lunes 31 de octubre de 2011