La interventora del Servicio Penitenciario Federal habló de la actualidad del sistema carcelario tras conocerse la existencia de una línea telefónica en la celda que ocupa el jefe narco Ariel Máximo “Guille” Cantero, líder de Los Monos de la ciudad de Rosario.
«Muchos presos tienen la posibilidad de tener teléfonos celulares, pero en el caso del teléfono que se encontró en la celda del jefe de Los Monos, es un teléfono con cable que no está amurado a la pared. Tiene un cable largo y en el pasillo no hay asiento, entonces como las celdas están abiertas durante el día, él (por Cantero) habrá llevado el teléfono a la celda para hablar sentado», explicó en Mañana Sylvestre la interventora del Servicio Penitenciario Federal, María Laura Garrigós de Rébori, sobre la polémica surgida tras conocerse que el jefe narco, Ariel Máximo “Guille” Cantero, líder de la banda Los Monos en la ciudad de Rosario tenía acceso a un teléfono de línea directamente desde su celda, en el penal de Marcos Paz.
Además aclaró que ese penal es de máxima seguridad, y «no hay una conexión de teléfono en la celda de Cantero». “Lo que si hay son teléfonos públicos, con los que se reciben y se pueden hacer llamadas. En ese pasillo hay solo dos celdas ocupadas, es probable que haya podido hacer eso en acuerdo con otro interno, pero no es (el teléfono) particular ni con conexión a la celda», advirtió la funcionaria.
En Radio 10, Garrigós de Rébori se refirió también al contexto de trabajo en el ámbito judicial y reclamó la necesidad de urgente reforma para mejorar la calidad de la administración de la Justicia en el país.
“Tenemos que militar la necesidad de la reforma de la justicia argentina, porque como está ahora, no está funcionando. Desde el 2013 que estamos ofreciendo reformas en la justicia», señaló.
Y aseguró que hoy “los jueces no rinden cuentas sobre su gestión, se los debería obligar a que lo hagan, contar cuántos expedientes tuvo y cuántos pudo resolver”.
