La líder de la Coalición Cívica pidió hace una semana que quien pensara castigarla, lo hiciera solamente a ella, eximiendo de culpa y cargo a sus candidatos a intendentes y legisladores. Esto, traducido, es ni más ni menos que pedir por el corte de boleta; o sea que los que entren al cuarto oscuro no la voten a ella pero sí a sus candidatos en los otros estamentos (diputados, senadores, intendentes, etc.). Ese pedido surgió como consecuencia de los resultados que obtuvo la chaqueña en las PASO, y según los últimos números, hay esperanza de que sea oído.
Según los datos que arroja la encuesta nacional de Management & Fit, un 48,7% de los consultados dijo que cortaría boleta, y un 12,6% aún no sabe. Esto significa que cerca de la mitad del electorado considera como una opción seguir los consejos de Carrió, con la intención de que «haya una representación más diversa en el Congreso», tal fue la pregunta que realizó la consultora. Pero hay otro sector al que también beneficiaría el corte de boleta: al macrismo. Y es que el PRO se presentará en las próximas elecciones con una «lista corta», es decir sin candidato a presidente, y esto provocó que su cabeza de lista, Federico Pinedo, saliera a hacer campaña tijera en mano.
Lunes 10 de octubre de 2011