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La columna de Pepe Mujica: “Europa aplica un proteccionismo interno brutal, pero para afuera nos meten la idea del libre comercio”

En su espacio de reflexión sobre política y economía internacional, el ex mandatario oriental habló de las posibles nuevas resoluciones que aplicaría el parlamento europeo, que con buenas intenciones en términos ambientales y de derechos humanos obligarán a su juicio a aumentar costos a aquellos países proveedores de materias primas como es el caso de América Latina.

Como todos los jueves en Radio 10 conversó con Gustavo Sylvestre el ex presidente del Uruguay, José “Pepe” Mujica quien presentó su columna de opinión, esta vez enfocada en las posibles nuevas medidas regulatorias del comercio con Europa que podría afectar a las exportaciones de Latinoamérica.

Aquí la transcripción completa de la charla entre Mujica y Sylvestre del día 16 de marzo de 2023 en el aire de Radio 10.

GS: Como todos los jueves a esta hora el gustazo, el placer de recibir en nuestro programa al ex presidente de la República Oriental del Uruguay, José Pepe Mujica. Buen día, Pepe, ¿Cómo estamos?

PM: Buen día, el placer de poder saludar a la distancia. Les quería llamar la atención que en el parlamento europeo se está discutiendo en un larguísimo proceso un conjunto de medidas que son un nuevo marco regulatorio para el comercio exterior, aduciendo la necesidad de mejorar las cadenas de suministros. Esto tiene que ver con la producción de materias primas, con industrias como la textil, el calzado, como los bienes agrícolas, como los vinos, etc. Muchas cosas que tienen que ver con lo que producimos en América y vendemos a Europa. Ese marco regulatorio por un lado trata de incluir lo que llaman el Pacto Verde que Europa pomposamente impone para ser neutra en producción de carbono a mitad de este siglo y yo digo: difícil es que el chancho chifle por cómo van. Y en nombre de los derechos humanos le van a encargar a empresas que controlen la debida dirigencia y no haya explotación de niños en el trabajo y en el de suministros que lleguen a Europa, y de que se produzcan ambientalmente y de forma muy razonable para no herir al medioambiente. Todos títulos pomposos y hermosos, naturalmente que nos llenan de alegría esas preocupaciones humanitarias de Europa pero que en el fondo van a significar un paquete peligroso de barreras no arancelarias y que tienen el peligro de aumentar los costos y sobre todo la concentración del comercio a través de empresas que manejen ellos y que se lleven parte de la torta. Estas decisiones que unilateralmente se apresta a tomar Europa y que ya tienen un par de años de discusiones y probablemente el año que viene estén aprobadas, significan que Europa se corta por sí sola, no consulta a nadie, no va a la OMC (Organización Mundial del Comercio), y nos propina un paquete que si te gusta lo llevas y si no, también. Por lo tanto, sugiero que en América Latina los gobiernos pongan las barbas en remojo y traten de acordar políticas conjuntas continentales para amortiguar los costos que va a tener esto, porque todo esto va a costar plata si queremos venderles. Y sería lo lógico que la plata la pongan los europeos y no nosotros, porque si no, va a caer sobre los más pobres. Es decir que nosotros también podemos discutir medidas con el comercio de ellos y busquemos algún margen para compensar lo que vamos a perder con estas disposiciones. Este es un tema complejo y muy largo, apenas quiero llamar la atención. Hay que darle pelota a este tema porque esto va a tener gravitación en el comercio del futuro, y Europa se corta por sí sola y no lo lleva a la OMC, no hace un acuerdo internacional, sino que lo decide en Europa y te lo aplica. Y por las dimensiones que tiene el asunto es tómalo o déjalo. Por lo tanto creo que cada gobierno debe moverse con sus vecinos y asumir una política de acuerdo continental para defendernos. Está muy bien la cuestión de los derechos humanos, muy bien lo de cuidar el medioambiente pero ¿Cómo se negocia con un continente? Voy a poner una anécdota para que ustedes entiendan: En Córcega le están dando US$2.000 de subsidio anual por tener una vaca, al punto de tener que inventar unos chips que las vacas se los tragan y no se los pueden sacar, porque se había transformado en una joda y había demasiadas vacas de papel para cobrar el subsidio. Entonces, tener que competir con esa ganadería es ridículo. Y así hay otro montón de cosas. Ellos nos tiran para afuera determinadas cosas y mantienen un proteccionismo interno brutal, pero para afuera nos meten la idea del libre comercio, libertad para vendernos pero no para comprarnos. Y como esa trampa la hemos padecido durante mucho tiempo, sería bueno que la gente que entiende de estas cosas se movilice, los mecanismos de relaciones exteriores se contacten con sus vecinos y a ver si podemos asumir una política continental para que lo mucho que importamos nosotros de Europa pague algo para enfrentar los gastos que van a significar estas medidas que va a tomar Europa. Hay que empezar a hacerlo ahora antes de que el sartén esté en el fuego. Es para nosotros defender el valor de lo que vendemos y que es parte de nuestro futuro.

GS: Así es. Y la necesidad de lo que usted marca, de la unidad y no eso de cortarse solo y querer hacerlo cada país en soledad como hay algunos proyectos.

PM: El problema nuestro es que va cada cual por su lado. Y así somos papita para el loro.

GS: Totalmente. Como siempre, Pepe, advirtiéndonos sobre hechos que por ahí no tenemos en cuenta, pero son muy importantes.

PM: Es importante porque no solo hay que producir y vender, sino que hay que vender al mejor precio posible, porque si no, no hay para repartir. Chau, te doy un abrazo, querido.

GS: Abrazo enorme.

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