En diálogo con Mañana Sylvestre, el ex presidente del Banco Central, Aldo Pignanelli, explicó qué motivó las nuevas medidas que implementó el gobierno para con la moneda estadounidense. Al respecto dijo que las mismas sirven «para paliar la fuga de capitales», provocada por «la expansión monetaria interna» y porque las multinacionales radicadas en el país envían remesas a sus casas matrices para hacer frente a la crisis en Europa y Estados Unidos. Por otra parte, señaló que «con los ajustes salariales y la inflación, el dólar en algunos sectores industriales se está retrasando», y que hacen falta retoques en el modelo. Además, la situación en Brasil, la proyección del mercado cambiario y las medidas estructurales que ayudarían a calmar la ansia por el dólar.
El destino del dólar
Pignanelli manifestó que «lamentablemente Argentina tiene una historia recurrente y cada tanto tenemos una fuerte fuga de capitales». Y dijo que eso se debe a motivos internos y externos. Internos: en los últimos años, la expansión de la base monetaria fue muy grande, con un crecimiento del 40% anual; lo mismo pasa con el gasto público. Cambió la tendencia que se daba hasta unos meses atrás, que la gente guardaba sus pesos y operaba con eso. Hoy ve el dólar barato y el que puede lo compra; en lugar de ir al consumo, va al dólar porque se considera una reserva de valor. Y las razones externas tienen que ver con la crisis de Estados Unidos y Europa, que provoca que muchas multinacionales instaladas en Argentina y en Brasil, giran todo lo que pueden en dólares a sus casas matrices, porque se lo requieren«.
El caso brasilero, paradigma
Comparando ambos mercados, el economista señaló que «Brasil está teniendo un problema similar en relación a las inversiones extranjeras en su territorio: giran dividendos a sus países centrales; es decir que muchas empresas europeas y estadounidenses se están financiando con lo que ganan acá. Los países centrales transfieren sus crisis estructurales a los países emergentes. Esto es recurrente: cuando tienen excedentes de dólares y no saben qué hacer, lo mandan para nuestros países pero en concepto de deuda externa para nosotros. Y cuando es al revés, que los países emergentes están más líquidos y los países centrales con problemas, lo envían como dividendos o remesas para liquides en sus casas matrices.
Medidas y demandas
Al respecto, Pignanelli manifestó que «todas estas medidas que se toman son correctas pero generan mayor demanda. Porque la gente dice algo está pasando, yo por las dudas compro«. En ese sentido señaló que hay un retraso en el valor del dólar. «Es cuestión de mirar la balanza comercial, superavitaria para el sector agrícola pero muy deficitaria para el sector industrial: compramos más productos industriales de lo que fabricamos». Por otra parte, indicó que en el país «hay un problema estructural; el especulativo se da cuando ve débil la situación. Y hoy Argentina está en una situación de debilidad, en el sentido de que la demanda de dólar supera al peso».
A largo plazo
Sobre las medidas que debería tomar el gobierno para aquietar la situación, Pignanelli señaló que «los controles y exigir liquidar divisas suena a manotazo de ahogado porque la crisis ya se desató. Lo que hay que buscar es el origen de todo esto. El gobierno en el proyecto del presupuesto del 2012 está intentado reducir esa expectativa, intentando que el gasto público se expanda a un menor ritmo de lo que se expandió hasta ahora, igual que la base monetaria. Es lo que tendría que hacer: tratar de bajar las expectativas inflacionarias, tranquilizar la situación, y de esa manera también se va a tranquilizar el mercado del dólar».
Audio completo de la entrevista
Viernes 28 de octubre de 2011