En diálogo con Mañana Sylvestre, el diputado nacional por Unión Celeste y Blanco Gustavo Ferrari señaló que la renuncia a la candidatura a la Procuración General de la Nación por parte de Daniel Reposo dejó una sensación “agridulce”, y refirió que “no había necesidad de prolongar tanto la situación”.
“Una designación como la del Procurador General de la Nación se funda sobre dos columnas fundamentales, una es la independencia que es la que defiende el art. 120 de la Constitución argentina que habla específicamente del Procurador General, donde pide autonomía funcional, garantía financiera, casi un cuarto poder que no esté inscripto dentro del poder judicial. La segunda columna es la idoneidad, que es el art. 16 de la Constitución que lo pide para cualquier funcionario público. Y el problema que teníamos es que se daba un problema en ambas columnas, es decir había problemas de independencia y de idoneidad”, dijo Ferrari.
“Nadie critica la posibilidad de que (Reposo) pueda ser responsable de la Sigen, o de otro organismo. Pero la necesidad de conocimiento en el ámbito del derecho, experiencia en el poder judicial, manejo del derecho penal y la probidad para este cargo que evidentemente Reposo no tenía. Con lo cual por supuesto que nos opusimos e impugnamos esta designación. Y lo de hoy es un sabor agridulce. Dulce porque es mejor que no tengamos a una persona que no es idónea, pero ¡qué tiempo que perdimos! Y ¿Qué necesidad había de elevar los ánimos?, se preguntó el legislador opositor.
Además, Ferrari remarcó que la candidatura de Reposo pudo ser cancelada mucho tiempo antes en vista de la poca adhesión que tuvo entre referentes calificados, consultados por el mismo Gobierno: “Hubo oportunidad de retirar el pliego, porque el Ministerio de Justicia envió 34 consultas a distintas instituciones de la Argentina, y de las 34 sólo 5 respondieron positivamente. Entre las que ni siquiera respondieron estaba el CELS, la Universidad de Buenos Aires, la Asociación Permanente por los Derechos Humanos, el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal. Es decir que había una cantidad de entidades que no respondieron y ni cuento las que respondieron negativamente. Y hasta terminó siendo motivo de burla en las redes sociales donde una cantidad de jóvenes le agregaba elementos al curriculum (de Reposo). Él mismo se vio en la obligación de engrosar el curriculum con algunas mentiras. Me parece que todos estuvimos sometidos a un debate innecesario”.
Luego, en Radio La Red recordó casos anteriores y manifestó que “si se hubiera propuesto a alguien que hasta pudiera no tener alguna señal de independencia pero sí de idoneidad, yo creo que todo el mundo hubiera apoyado como ocurrió con las postulaciones que en su momento hizo Néstor Kirchner tanto para la Procuración con Esteban Righi, como para la Corte cuando propuso a Zaffaroni, y a Argibay”.
Sobre la fiscal Alejandra Gils Carbó, que aparece en el horizonte político como la nueva candidata del Gobierno a la Procuración General de la Nación, Ferrari señaló que “lo que se comenta sobre la fiscal y el conocimiento público que hemos tenido sobre su desempeño, precisamente no puede decirse que no tenga experiencia en el ámbito judicial, si bien no hace muchos años que fue designada. Tiene trayectoria en el ámbito judicial, pero no tiene experiencia penal. Pero en verdad yo debo decir que no va a generar el rechazo que tuvo Reposo. Hay alguna intencionalidad política de parte del Gobierno en nombrar a alguien que tuvo participación en casos resonantes”.
Audio completo de la entrevista
Viernes 8 de junio de 2012
