El consultor y analista político dialogó con Gustavo Sylvestre en Radio 10 sobre el reciente encuentro entre Javier Milei y Donald Trump en Estados Unidos, y analizó las implicancias simbólicas y políticas que deja la reunión.
“El presidente tuvo la actitud del que busca congraciarse con el poderoso”, señaló el consultor Federico González sobre la visita de Milei a Donald Trump y las posteriores declaraciones del presidente norteamericano. “Trump jugó el rol del que se siente en su trono, y Milei fue en actitud de sumisión, como alguien que va al pie del poder”, puntualizó en Radio 10.
El analista interpretó el gesto como una muestra de debilidad más que de estrategia: “Cuando un gobierno cree que su salvación depende de la bendición del poderoso, es porque ya agotó todos sus recursos. Es como quien dice: me queda una sola carta, y esa carta es decir ‘soy amigo del que manda’”.
González sostuvo que la imagen que proyectó Milei en el exterior no contribuye a fortalecer la posición de la Argentina. “No hubo resultados concretos, ni acuerdos, ni beneficios visibles. Solo un gesto de subordinación que pretende transformarse en capital político interno. Pero eso no resuelve los problemas de fondo del país”, dijo.
El consultor también recordó la larga tradición de afinidad de ciertos sectores de poder locales con los Estados Unidos y consignó que «en la historia argentina hubo siempre una corriente de pensamiento profundamente norteamericanista. Lo curioso es que ahora se disfraza de rebeldía, cuando en realidad es una forma más de dependencia”.
Finalmente, González cerró con una advertencia sobre el estado de ánimo social y económico. “Quizás hoy los mercados estén más tranquilos, pero la estabilidad no alcanza. La gente no vota a quien calma a los mercados, sino a quien trae soluciones reales. Y ese es el gran desafío que el gobierno todavía no logra encarar”, cerró.
