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El ex comandante del Irizar, Guillermo Tarapow, analiza el choque de barcos en el Río Paraná

En Mañana Sylvestre, Guilermo Tarapow expresó su dolor por la tragedia ocurrida por el choque entre el arenero Río Turbio y el barco paraguayo Aya Payagua que dejó 6 muertos, y consideró normal que el buque argentino, por sus características se haya hundido en menos de 5 minutos.

“No es habitual pero puede suceder este tipo de accidente si no se tienen en cuenta las reglas para navegar en el río. El Río Paraná de Las Palmas se caracteriza por tener siete grandes vueltas y dos angosturas donde está prohibido el sobrepaso, teniendo derecho de paso el buque que va navegando aguas abajo por un tema de gobernabilidad del motor, teniendo que aguardar el que viene navegando aguas arriba, porque es el que tiene la corriente en contra y tienen mejores condiciones para gobernar (la nave), precisó el ex comandante del Rompehielos Irizar.

El 75% de los buques que navegan la hidrovía Paraná-Paraguay tiene bandera paraguaya, y cada 4 buques, 3 son de bandera paraguaya. En ese sentido, tienen muy buenos profesionales el Paraguay. Yo particularmente he cruzado al querido Arenero Rio Turbio cientos de veces, lo mismo al Ava Payagua. Lo que me da la impresión es que el arenero nuestro se ha hundido en mucho menos tiempo de lo que se dice. Cinco minutos en esas circunstancias parece poco tiempo pero en realidad es muchísimo. Ojalá al menos haya tenido 5 minutos, en una de esas capaz haya tenido mucho menos tiempo y creo que los peritos navales lo van a poder determinar porque ambos tenían el AIS, el sistema automático para identificación de buques a partir del cuál se puede observar la velocidad del buque, la hora y el rumbo que tenía”, explicó.

Luego, continuó: “Estos registros los tiene la Prefectura Naval, y con ellos se puede observar además de las comunicaciones radiotelefónicas, en qué momento y con qué rumbo venía cada buque segundo por segundo o a lo sumo una vez cada 4 segundos, para precisar en qué momento se produjo el impacto, porque en ambos buques va a haber un cambio de velocidad y el momento que va a dejar de transmitir el arenero que es el momento en que su equipo está bajo el agua y ahí se va a determinar si fueron 1, 2 o 5 minutos”.

Más adelante señaló que “la profundidad en ese punto no es muy importante y de hecho el buque ha quedado semihundido. Cuando un buque arenero viene cargado viene con su borda muy próxima el agua no pudiendo pasar cierta marca que es lo que determina su reserva de flotabilidad. Cuando el buque viene muy cargado es cuando tiene menor su reserva de flotabilidad una colisión de estas características es la peor de las condiciones en que un buque puede llegar a una colisión”.

“Por la inclinación que produce el choque entre los buques más la carga, y la probable inclinación de la carga puede producir este accidente que es lamentable más que nada por las pérdidas de vidas humanas. Los seguros siempre los cubren, primero hay que recuperar a los sobrevivientes, y a las víctimas, y es lógico que cuando uno está apenado por la vida de los seres queridos, de los familiares, de los compañeros, dice cosas que no quiere y de las que se puede arrepentir. Es normal que en este tipo de circunstancias mucha gente diga cosas sin haber analizado todos los ángulos del problema”, recalcó.

Audio completo de la entrevista

Lunes 14 de mayo de 2012

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