La Justicia argentina confirmó la condena por homicidio agravado por odio racial. El abogado Gregorio Dalbón, representante de la familia de Lucas González, destacó el valor jurídico y social del fallo en declaraciones a Mañana Sylvestree en Radio 10.
En un hecho sin precedentes para la Justicia argentina, la Cámara de Casación confirmó la condena a cadena perpetua para los policías responsables del asesinato de Lucas González, el adolescente de 17 años acribillado en 2021 por efectivos de la Policía de la Ciudad. La resolución judicial ratificó el agravante de odio racial, algo que el abogado Gregorio Dalbón calificó como “una victoria jurídica y cultural que quedará para la historia”.
“La Corte no va a hacer absolutamente nada, acá termina la historia”, aseguró Dalbón en el programa Mañana Sylvestre de Radio 10. El letrado subrayó la dureza del momento para los familiares, especialmente para Cintia, la madre de Lucas: “Ahora empieza una nueva vida para ella. Una vida sin Lucas, pero con la satisfacción mínima de saber que su hijo dejó algo para la sociedad”.
Dalbón sostuvo que el crimen fue un claro caso de violencia institucional con motivación racial: “Fue un homicidio quintuplemente agravado. Se mató por el color de la piel. Y eso es muy importante, porque no hay antecedentes en Argentina”. Y agregó: “Esto va a ser jurisprudencia no solo en nuestro país, sino también en el mundo”.
El abogado también remarcó que el racismo estructural fue central en este caso: “Siempre dije en mis alegatos: ‘Cierren los ojos e imaginen que en vez de estos cuatro chicos saliendo de entrenar, hubiera un BMW con rubios de ojos celestes. ¿Creen que lo hubieran parado?’. Si la respuesta es no, entonces déjenme el agravante del odio racial”.
Los elementos que permitieron probar el odio racial como agravante fueron contundentes. “Mucho de lo que se usó fueron las declaraciones de los sobrevivientes y las propias escuchas telefónicas. En ellas se escucha claramente: ‘El bolita se escapó’, ‘estos negros de m…’, ‘vos sos de Varela’, ‘¿dónde tenés el arma con la que mataste a tu amigo?’”, detalló.
Dalbón también apuntó contra los abogados defensores de los policías, Soto y Sarubi, vinculados al espacio político de Patricia Bullrich, por revictimizar a los jóvenes durante el juicio: “Les preguntaban si la cancha era de tierra o de pasto, de qué color era la pelota, si tenían un apto médico… Los torturaron incluso en el juicio”.
“Esta es una batalla cultural que ganamos nosotros: los marrones, los que defendemos al pueblo, los que defendemos la igualdad ante la ley”, expresó con emoción. “Lucas va a dejar un precedente que se va a enseñar en las clases de derecho”.
El fallo no solo condena a los autores materiales del crimen, sino que también sienta un precedente inédito en el país. La condena firme por homicidio agravado por odio racial abre un nuevo capítulo en la jurisprudencia argentina y envía un mensaje claro: “En la Argentina, no se puede matar por portación de cara”.
Finalmente, Dalbón aseguró que este caso será estudiado a nivel internacional: “Ya salió en diarios de Francia, de la India, de África. Ahora va a salir la sentencia firme de Casación y eso va a ser utilizado en derecho comparado. Es trascendente”.
