En diálogo con Mañana Sylvestre, el economista y embajador argentino en Francia, Aldo Ferrer, refiriéndose a la crisis financiera que golpea a las economías del mundo dijo que «el debate en europa se ciñe a qué esperan los mercados y qué hay que hacer para ganar su confianza; buscan satisfacer los impulsos especulativos, pero eso no resuelve el problema«. Al comparar las situaciones dijo que «les está pasando lo que a nosotros en los 90s: sacrifican la economía real en favor de la especulación financiera, y es necesario poner la cosa en otro terreno para salir adelante». «Hay un problema estructural: los mercados especulativos son incorregibles y los salvatajes no alcanzan. Hay que reestructura de la deuda, como hicimos en Argentina; y el sector financiero debe absorber parte del costo de esa reestructuración»
Argentina en los 90s
Al referirse a la situación en nuestro país, Ferrer manifestó que «el Estado se endeudó hasta la insolvencia y se vendió el patrimonio nacional para pagar deuda. Eso mismo se está tratando de hacer con otros países deudores europeos acá. Para salir adelante, los argentinos, a la salida de la crisis y después del default, hicimos una operación fundada en los intereses del país: se hizo una propuesta que la mayor parte del mercado aceptó; una oferta de canje cumplible». Por otra parte, el ex ministro de economía nacional dijo que «en este y en otros episodios, Argentina ha sido una suerte de laboratorio de ensayos de problemas que después adquirieron dimensiones globales«.
Repercusión local de la crisis global
Ferrer desestimó esta posibilidad al decir que «para los países periféricos, la única respuesta es consolidar la gobernabilidad; no caer en la trampa del endeudamiento, mantener las finanzas públicas en orden, fortalecer los pagos internacionales, tener buenas reservas en el banco central, lo que tenemos. Todo eso nos permite observar la crisis desde afuera sin que la Argentina sufra un costo, porque estamos parados sobre nuestros propios recursos sin depender de la plata de afuera«.
Crisis en Londres, crisis del Estado
Al respecto, el economista vinculó la crisis global con «las grandes inequidades del sistema global, post guerra fría». «Se suponía que no habría los conflictos del pasado pero se ve que no es así. vivimos en un mundo donde hay perturbaciones políticas y un malestar social creciente debido a las desigualdades». Además, pidió más intervención de los gobiernos nacionales al decir que la crisis «está muy ligada a la incapacidad de los Estados, que quedaron maniatados por la especulación financiera y los criterios de los mercados, que les impide hacer lo que hay que hacer en materia de inversión, de políticas sociales y de generación de empleo. El Estado está paralizado en las economías del primer mundo frente a los mercados sobredimensionados, y si no se recupera la capacidad de gestión pública frente a esta realidad, la incertidumbre seguirá durante un tiempo prolongado«.
Situación estructural
«Esta crisis no es coyuntural ni una fase del ciclo económico sino un problema estructural, que se viene gestando hace 40 años. Es la sobredimensionamiento de la actividad financiera«, dijo Ferrer y agregó: «se ve un gran esfuerzo en las principales economías, por ejemplo en la Unión Europea, por sostener políticas con grandes planes de ajuste, con grandes apoyos al sector financiero, y eso no resuelve el problema. Incluso genera cosas como la baja de la calificación de la deuda norteamericana, lo que genera incertidumbre». Por otra parte, explicó cómo se llegó a esta situación de «hipersensibilidad de los mercados financieros»: «hoy se producen comportamientos en manada; de pronto aparece una burbuja especulativa, va la plata allí y multiplica la burbuja hasta que al final revienta o restringe el crédito a donde tiene que ir, lo que termina dañando a la economía real porque afecta a la producción, el empleo y el comercio internacional»
Audio completo de la entrevista
Martes 9 de agosto de 2011