En medio de la crisis energética que afecta a gran parte del país, con Mar del Plata paralizada por la falta de gas en uno de los inviernos más crudos, el ex titular de Energía Argentina (ex ENARSA), brindó una entrevista en Mañana Sylvestre (Radio 10) donde responsabilizó directamente al gobierno nacional por la falta de planificación en materia energética. Además, anticipó que la restitución del servicio tendrá un costo directo para cada familia.
“La principal causa de lo que estamos viviendo es la falta de planificación”, sentenció Agustín Gerez, experto en temas energéticos y ex titular de ENARSA en tiempos de Alberto Fernández. “El presidente no cree en la planificación, deja todo librado al mercado. Y el mercado sin reglas claras no se ordena. Es imposible ordenarlo”, subrayó.
Gerez, quien lideró la construcción del Gasoducto Néstor Kirchner, denunció que esta gestión frenó obras clave para garantizar el abastecimiento energético: “Se suspendió la etapa dos del gasoducto, que ya tenía todos los estudios de ingeniería listos. Se suspendió la licitación del TerConf para generación eléctrica. Se paralizó la planta compresora Las Armas, fundamental para el suministro de gas en Mar del Plata”.
Según explicó, esa combinación de decisiones más un invierno especialmente frío configura un “combo perfecto” para el colapso: “No es una situación nueva. El año pasado se cortó el GNC. En verano, Rosario se quedó sin luz. Y esto se va a repetir el próximo verano, porque la demanda energética crece año a año y no hay obras nuevas para acompañar ese crecimiento”.
El costo lo pagará la gente
El ingeniero explicó además una consecuencia directa del corte del servicio domiciliario: “La normativa vigente del Enargas establece que, ante un corte, deben ir verificadores técnicos a cada domicilio para constatar que el sistema esté en condiciones. ¿Quién paga eso? Cada familia”.
Para habilitar nuevamente el gas, se necesita la intervención de un gasista matriculado. “El gas es un hidrocarburo peligroso. Si hay una fuga, puede explotar una casa. Por eso cada conexión debe ser verificada. Esto va a generar una gran restricción en el consumo domiciliario y será a costa de cada usuario”, advirtió.
Consultado sobre una eventual excepción para restituir el servicio sin inspección técnica, Gerez fue categórico: “Yo no firmaría esa excepción. Estamos hablando de algo muy delicado. Hay conexiones domiciliarias de gas de hace 30 o 40 años. No podés jugar con la seguridad”.
Un problema estructural y evitable
Gerez remarcó que esta crisis no era inevitable. “Si vos le sacás la energía al país, el país no puede funcionar. Estamos hablando de un área central para el funcionamiento de la economía”, afirmó, insistiendo en que las obras estaban planificadas, iniciadas y contaban con respaldo técnico antes del cambio de gobierno.
Finalmente, concluyó: “Este gobierno tuvo 16 o 17 meses y no avanzó en nada. Ahora las consecuencias las pagan los ciudadanos. No sólo no hay gas, sino que encima van a tener que pagar por recuperarlo”.
La advertencia fue clara: la crisis energética no es producto del azar, sino de decisiones políticas concretas. Y si no se corrige el rumbo, los próximos veranos podrían ser tan críticos como este invierno.