El consultor en comunicación política analizó en diálogo con Gustavo Sylvestre la crisis generada en torno al candidato a diputado nacional de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires acusado de recibir dinero del narcotráfico. Riorda advirtió que el episodio no solo afecta al dirigente, sino que compromete a todo el oficialismo.
“Claramente es una crisis. Yo diría que tiene dos modos de ser analizada: la crisis del propio (José Luis) Espert, pero además la crisis de La Libertad Avanza a nivel nacional”, explicó en Radio 10 el experto en comunicación política, Mario Riorda. Según sostuvo, la estrategia inicial del oficialismo de “nacionalizar la campaña” quedó desbordada por el escándalo, lo que los llevó a intentar lo contrario: “Hoy deben estar queriendo localizar las campañas para que este efecto de Buenos Aires no se expanda”.
Uno de los puntos críticos para Riorda fue la performance mediática del propio candidato: “Es increíble que haya ido a la televisión sin poder responder si recibió o no dinero del narcotráfico. Esa imposibilidad de dar un sí o un no define la comunicación de crisis: genera incertidumbre”.
En ese marco, consideró que Espert “perdió el contexto de poder” y que su intento de “clausura unilateral” del tema al -afirmar que no dejaría que la campaña girara en torno a la denuncia- resultó inútil: “En una crisis lo que se pierde es el poder de definición de la agenda”.
Imagen en caída y efecto nacional
Riorda reveló que mediciones privadas marcan un nivel de rechazo inédito: “La imagen negativa de Espert está entre 65 y 70% y en algunos lugares es mayor. Prácticamente se equipara a la de Karina Milei”. Para el consultor, esta situación “afecta claramente a toda la campaña electoral a nivel nacional”.
Además, advirtió sobre la desorganización en la respuesta oficial: “Cuando las crisis no son bien gestionadas producen vocerías desorganizadas, como se vio con Patricia Bullrich diciendo que Sper debía dar explicaciones mientras el presidente lo defendía”.
Estafa, corrupción y narcotráfico
Riorda destacó la gravedad del escenario: “Este gobierno venía de una estafa, de la corrupción, y ahora suma la relación con el narcotráfico. Es el límite máximo”. Y remarcó que la crisis política se potencia con el malestar económico: “Hoy en algunas provincias el gobierno perfora la barrera del 30% de aprobación, con un rechazo del 60 al 65%. Dos terceras partes de la ciudadanía rechazan el rumbo del gobierno”.
Finalmente, Riorda cuestionó la lectura de encuestas que muestran a La Libertad Avanza con altos números nacionales: “Son resultados mentirosos. En muchas provincias los candidatos libertarios rinden muy por debajo de la marca nacional. La crisis económica y los escándalos empiezan a hacer perder terreno seriamente al oficialismo”.