«Buen día. Querido Gato, estoy con la oficial al lado. No me dejan hablar», fueron las pocas palabras que llegó a decir Milagro Sala antes que una oficial penitenciaria le quitara el teléfono.
La integrante del cuerpo penitenciario que se presentó como oficial Domínguez, tomó el teléfono y en vivo señaló: «(Sala) no puede dar una entrevista ahora porque no se encuentra autorizada», dijo.
«Tiene que ser autorizada por el juez. No puede seguir hablando, señor. Hasta luego», agregó la oficial, y culminó el contacto.
La dirigente permanece detenida desde el 16 de enero pasado, a pesar de no estar procesada ni tener sentencia firme. Está acusada de «instigar» una protesta contra el actual gobernador de Jujuy Gerardo Morales, a la que luego se sumaron imputaciones por otros delitos.
Jueves 8 de diciembre de 2016
